Las liquidaciones son una oportunidad fantástica para que tus clientas renueven su armario con piezas de calidad a precios mucho más bajos. Pero también pueden convertirse en una trampa si no sabes cómo orientar la compra. Tanto si llevas tiempo como asesora de imagen como si acabas de comenzar, aquí tienes algunas claves para acompañar a tus clientas —ya sea de forma presencial u online— con criterio y confianza.

Antes de empezar: define objetivos claros

Tanto si van a salir juntas de compras como si la acompañas a distancia, dedica tiempo a conversar con tu clienta sobre:

• Qué prendas necesita realmente.
• Qué presupuesto tiene.
• Qué huecos hay en su fondo de armario.
• Qué estilo quiere potenciar en esta etapa.

Si trabajas online, puedes enviarle un breve cuestionario o hacer una videollamada para definir juntas una lista priorizada de piezas clave. Así evitarás compras impulsivas que luego se quedarán colgadas en el armario (virtual o físico).

Enséñale a identificar calidad, no solo precio

Las rebajas generan el impulso de “está tan barato…”. Tu función es recordarle que el descuento no sustituye la calidad. Si acompañas de manera presencial, revisa con ella los tejidos, costuras y el ajuste real.

Si trabajas online, puedes:

• Explicarle cómo leer bien las fichas de producto (composición de la prenda, medidas, fotos de detalle).
• Enviarle ejemplos de marcas con buena relación calidad-precio.
• Proporcionar una lista de señales de alerta (por ejemplo, fotos borrosas o descripciones vagas suelen ser mala señal).

Mantén el foco en su estilo personal

Ya sea en tienda o en un carrito virtual, es fácil perder el norte. Ayúdala a contrastar cada prenda con su estilo:

• ¿Refleja la imagen que quiere proyectar?
• ¿Se alinea con su moodboard o referencias?
• ¿Va a usarla con frecuencia o solo “porque estaba de oferta”?

Si trabajas online, pídele que te comparta capturas de pantalla de los artículos que está considerando para que puedas revisarlos juntas.

Prioriza versatilidad y atemporalidad

Sea presencial u online, ayúdala a invertir en prendas que combinen con su armario actual y que no se pasen de moda en una temporada. Por ejemplo: un buen abrigo clásico, unos vaqueros de corte favorecedor, una blazer neutra…

Si compras online, crea una carpeta compartida (Pinterest o Google Drive) con ejemplos de piezas versátiles que pueda buscar.

Gestiona expectativas y emoción

Las liquidaciones generan presión y urgencia: “última talla”, “últimas horas”. Tanto en persona como en la pantalla, tu papel es aportar calma. Recuérdale que siempre aparecerán nuevas oportunidades y que no es necesario precipitarse.

Un buen truco si trabajas online: sugiérele dejar las prendas en el carrito 24 horas y luego revisarlas con más claridad mental.

Revisión final antes de comprar

Antes de pasar por caja, haz una comprobación:

• La prenda le favorece de verdad?
• ¿Cumple con el objetivo inicial?
• ¿Puede combinarla con mínimo 3 cosas que ya tenga?

En asesorías online, puedes hacer esta revisión compartiendo pantalla y comentando cada artículo en tiempo real, o mediante un informe con tus observaciones.

Recuerda: acompañar a tu clienta en rebajas no es sólo ayudarla a comprar barato. Es enseñarle a comprar con intención, criterio y fidelidad a su estilo personal, sea desde una tienda física o una plataforma online. Y eso, más que cualquier descuento, es lo que hará que confíe en ti a largo plazo.

Y si tú misma sientes que aún hay cosas que te hacen ruido en esta temporada, o notas que tus clientas se frustran en este proceso, te recomendamos este vídeo del canal de YouTube de Annie Maya, directora de IDIP:

🎥 5 razones por las que NO disfrutas las liquidaciones

En él, Annie explica con claridad por qué muchas veces nos sentimos abrumadas en época de rebajas, qué mecanismos se activan en nuestras elecciones, y cómo cambiar ese chip para disfrutar más, comprar mejor y estar en paz con lo que decidimos llevar al armario.

Un contenido atemporal y muy valioso, ideal para reflexionar y compartir con tus clientas.